Retomando el camino.

Muchas veces las excusas sobran y las razones incomodan, sobre todo cuando lo importante es resolver mirando hacia adelante, eso si, con soluciones de raíz, que nunca es bueno dejar flecos sueltos... Esperemos.

Tiempo atrás decía en este mismo blog que aún nos quedan muchas revoluciones en el camino, tanto cómo pueblo como cómo personas. No se si esta crisis será eso, una solución para los problemas estructurales que tenemos, a nivel nacional, europeo, mundial.. pero no lo parece mucho, que queréis que os diga. Mas bien parece un remiendo sobre lo que teníamos, una cura de urgencia... y no una solución para una patología, que no es leve precisamente. 

Esto lo pensamos mucho, pero es especialmente importante que anoche uno que no es cualquiera lo dijera en voz alta y ante casi mil personas, en Mérida, en la clausura del Congreso de UGT Extremadura. Como el dijo, queda poco espacio para la esperanza, pero caminemos.

Y es que es cierto, aun sigue siendo necesario remover muchas cosas para, entre otras cosas, caminar hacia un mundo sin pobreza, un mundo donde no se tenga la suerte echada por haber nacido en un territorio o en otro, en uno u otro pais... y no vamos por buen camino. A nuestro alrededor, e incluso en nosotros mismos, quedan muchas causas que siguen necesitando abriles... pero no corren buenos tiempos para esta lírica, sobre todo porque la pobreza de los demás nos parece menos pobreza cuando parece que se tambalea un poco nuestro bienestar.

En fín, que abril, abril aun es Revolución... pero ahora toca irse a celebrar la felicidad de unos novios diciendole al mundo que se quieren, y en mi caso la de sus padres de poder compartirlo con sus amigos. 

Que toda revolución requiere sus pausas : )