Ha sido niña.

Siempre me ha resultado sugerente la idea de criar un niño o una niña, de cuidarles, de intentar ayudarles a crecer. No se porque, pero el deseo es mas fuerte con una niña, aunque, obviamente si fuera niño lo querría igual, que cuando busqué un gatito común y llegó a mis manos Sordito, un angora blanco autista y glotoncete, lo acabé queriendo tanto como a Momo ; )

A veces he imaginado la típica escena en la que la matrona sale del paritorio y dice aquello de: "Ha sido niña". Dado que por cuestiones obvias será dificil que Carlos o yo engendremos, en mi caso sería mas bien un funcionario quien dijera la frase, pero el caso es que, el que escribe quiere ser padre, aunque antes de dar ese paso intentaré analizar si puedo dedicar al crio el tiempo y la dedicación que merece. Cariño es claro que no le faltaría, y no solo mío.

Y, recuerdo todo esto mientras echo un vistazo a los blogs que suelo visitar com mas o menos asiduidad y prisas. En este caso, mientras leo Otro mundo es Posible, en el que su autor hablaba de su hija, Violeta ( curioso, el nombre de mujer que más me gusta ), y en sus comentarios refiere un texto que desconocía y que me ha encantado, de Khalil Gibran. Os lo copio, es toda una declaración de intenciones : )

Tus hijos no son tus hijos
son hijos e hijas de la vida
deseosa de sí misma.
No vienen de ti, sino a través de ti
y aunque estén contigo
no te pertenecen.
Puedes darles tu amor,
pero no tus pensamientos, pues,
ellos tienen sus propios pensamientos.
Puedes abrigar sus cuerpos,
pero no sus almas, porque ellas,
viven en la casa del mañana,
que no pueden visitar
ni siquiera en sueños.
Puedes esforzarte en ser como ellos,
pero no procures hacerlos semejantes a ti
porque la vida no retrocede,
ni se detiene en el ayer.
Tú eres el arco del cual, tus hijos
como flechas vivas son lanzados.
Deja que la inclinación
en tu mano de arquero
sea para la felicidad.

Khalil Gibran.