09 marzo 2008

Calcetines de colores.



En cuanto Carlos termine de vestirse ( ay que lentito que es... ) saldremos para Barcarrota, a votar con mis padres. Me gusta votar con ellos, de ellos aprendí a emocionarme queriendo un pueblo mejor, una Extremadura mejor, una mejor España, más libre, donde quepamos todos, y donde el poder esté lo más posible en manos de los ciudadanos, ellos me enseñaron que el corazón lo tenía a la izquierda.

Guillermo dice hoy en su blog que ayer le contaba a su hija y a unas amigas suyas que todos los votos pesan lo mismo, y que esa es la magia de la democracia, y así es. Aun recuerdo como hace años me quedé helado al conocer a un chico en Madrid, creo recordar que tenía 30 años, andará rozando los 40 ahora, aunquen en cuarentena es cómo debería estar por antidemocrata, que decía que lo injusto de la democracia era que su voto, siendo el una persona formada y de familia culta, pesara lo mismo que el de mi madre, que nunca pudo estudiar mas allá de lo básico.

Recuerdo que estabamos comiendo, nos habíamos conocido la noche antes en un bar madrileño y era de mis primeros ligues. Todo terminó ahi, obviamente no llegué ni al postre con el. Poco tenía yo que compartir con alguien que piensa así. Supongo que hoy su pesado voto irá para Rajoy. Y luego dicen que los gays somos más sensibles... cuanto mito por Dios!.

En fin... Yo feliz, hoy me he puesto calcetines de colores, lo hago siempre que me levanto con buen ánimo, y hoy lo hago pensando en quien anteayer mataron, porque por lo que he leido era una persona buena, querida, y que disfrutaba viviendo con los suyos. Que era generoso y comprometido me quedó claro al saber de su implicación política y al escuchar a su hija. Así que en homenaje a el, y queriendo en cierta medida votar con él parto feliz y tranquilo, con toda mi ilusión y esperando que la mayoría de los ciudadanos piense que, como yo lo creo, el mejor presidente que podemos tener durante los próximos cuatro años es el mismo que nos ha regalado los últimos cuatro, bien llenos de igualdad, democracia y respeto hacia los demás. Si así no fuera, con tristeza asumiré el resultado, pero hasta esta noche sigo ilusionado imaginándome cuatro años mas para España llenos del mayor número de colores posibles.

Asi que, amigos, con vuestro permiso me dispongo a ir a votar de la mano de mis padres, que me enseñaron casi todo lo que soy.

Feliz día de elecciones.