12 marzo 2007

No todas las víctimas.

NUNCA he dado permiso a nadie para hablar por mi boca, para llorar por mis ojos, para decir cómo debo sentirme. Por eso me da tanta vergüenza que unos u otros intenten aprovecharse de la debilidad debilidad de la víctima. Por eso, además de al dolor de una pérdida, me enfrento a la rabia de saber que somos juguetes en manos de quienes tuvieron el poder de haber evitado tantos asesinatos y tantos intentos de asesinato. Juguetes para jugar a su juego de buenos y malos.

Este es sólo un extracto de la carta al director que bajo el título Nunca en mi nombre. ha sido escrita por Bárbara Morales García y publicada por El Periódico de Cataluña.

Bárbara es viuda de J. G., uno de los 16 asesinados el 11-M en el tren de la estación de Santa Eugenia.